Reglas de navegación

Yo soy quien crea mares, ciudades y puertos,
quien dicta las reglas y provoca las tormentas,
quien divide el horizonte y quien bucea
por tus venas a pelo y sin aire.
 
Yo soy quien te grita mientras tu corazón
de sal respira, quien vigila tus abordajes,
yo, amor,
quien forja esta tabla de mareas
y pacta cuadrantes,
capitán que equilibra las corrientes.
 
Yo, sirena negra que renuncia y te espera.
Yo, vigía de tus sueños, la que fija estrellas.

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Un poema -de Mertxe Manso, jurista y docente, autora de varios libros de poesía, literatura infantil y juvenil, y ganadora de varios premios literarios- que nos guía con su título a su comentario.

Y el poema consiste en una declaración lírica de amor -tomando la terminología del mar y su dominio- a un tú poético que se tiene que sentir como poco conmovido.

En tres estrofas, en versos asimétricos, sincopados y elípticos -donde radica su belleza estilística, con su insistencia en la pasión erótica- el yo lirico se muestra apasionado, sensual, lleno de fuerza amatoria como solo en una composición lírica se puede hacer.

Gracias a Mertxe Manso por la generosidad de leer y grabar su propia poesía.