¿Todo está escrito?
“En realidad, no comento nunca por escrito mis poemas, creo que los poemas tienen la interpretación que cada lector le dé. No sé por dónde empezar con un poema mío. Puedo decirte que es un poema de instantes vividos, de lo fugaz que es todo lo que se vive, momentos que pueden parecernos eternos, pero en realidad son cometas fugaces, son comas en la página. Puedo decir que al escribir me pierdo en el abismo del silencio de las cosas que palpita en mi memoria, y lo proceso desinhibiéndome con la palabra, que se deja escribir abriendo ventanas y puertas, fluyendo y gozando entre ellas. El poema queda inconcluso, abierto a la imaginación, y clamando por seguir a pesar de todo en la búsqueda de lo irresoluble, la vida, la muerte, la eternidad. Para seguir en el misterio, en la búsqueda, es necesario que no crea que todo está escrito, siempre debe quedar un pasito por dar, un charco por saltar, un lugar, una palabra, un vuelo, un verso. Siempre nos queda la Poesía.”
Gracias a Consuelo Jiménez Martín -autora de tres poemarios, La Huella de tu Olvido, Palabra duende sin final y Arteria Consuelo y participante en varias antologías- por la lectura de su poema y su comentario sobre el mismo.