La espalda del espejo
El espejo carga lo visto en su espalda;
allí se hunden brillos y cuerpos,
los ojos secuestrados de Narciso.
Agua pesada en que naufraga
cada reflejo, orilla última
donde las tablas del instante se parten.
A cada cara su cruz
donde se estaquea el movimiento,
cruz nuestra que no vemos,
como ese sedimento de temblores
en el revés de los párpados.
Dar la vuelta al espejo será
una manera nueva de mirarse,
evaporándonos en sus espaldas
negras, doloridas.
Un poema de Laura Giordani (poeta, escritora y profesora argentina residente en España; ha publicado nueve poemarios y varios ensayos y su obra poética ha sido incluida en diversas antologías) comentado por la propia autora.
“La espalda del espejo” pertenece al libro “Noche sin clausura” (2010, Amargord). Al igual que otros textos de este poemario, este poema nos desafía a cambiar nuestra manera ordinaria de mirar y nos invita a darle la vuelta al espejo. Por supuesto, de manera simbólica.
Así como nuestro satélite, la luna, tiene una cara que permanece siempre oculta a nuestros ojos, nuestro yo tiene un revés, una cara oscura, desconocida para los demás y para nosotros mismos. Desde una perspectiva psicológica, podemos decir que se trata de nuestra sombra, esa parte ignorada que es necesario mirar de frente en algún momento si queremos conocernos de manera integral.
Uno de los males de nuestro tiempo es el narcisismo, fomentado por la cultura del selfi y las redes sociales. El verso “los ojos secuestrados de Narciso” hace referencia a este ensimismamiento en la propia imagen que nos ciega al “otro”, a ver las necesidades ajenas y nos encandila con nuestro triste reflejo.
La poesía ofrece herramientas que nos ayudan a cuestionar todo aquello que hemos naturalizado, a la vez que sacude nuestra sensibilidad adormecida por un mundo vertiginoso y— muchas veces, despiadado.”
Gracias a Laura G. por su generosidad y amabilidad al leer su composición y ofrecernos a la vez su comentario.
