Pubertad

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De aluminio tu voz, clavel logrado.
Trece lunas dormidas en tu frente
y una brisa de trópico silente
por tu cuerpo de lirio inestrenado.
 
Vibra tu cisne de plumaje helado
las virtudes de un arpa incandescente,
y tu carne vestida de relente
se mancha de un crepúsculo ignorado.
 
Y se llenan tus ojos de violetas,
y sientes tus palomas tan inquietas
que sus picos perforan tu vestido.
 
Y una amapola suena deshojada
y lloras de dolor contra la almohada
por la infancia de nieve que has perdido.

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Un poema -un soneto- de Manuel Pacheco (poeta extremeño que, junto a Jesús Delgado Valhondo y Luis Álvarez Lencero, escribió la poesía extremeña más conocida) que desarrolla en los catorce versos el titulo con el que se presenta.

La composición contiene, pues, la descripción poética de la llegada y presencia de esa etapa vital -entre la infancia y la juventud- de un tú poético.

Lo que más llama la atención de la lectura es el recurso de la presencia de las flores -hasta cuatro- y de los animales -dos- para analizar ese proceso de cambios físicos y psicológicos, con una elegancia y sensibilidad admirables.

Es la edad con que nuestros alumnos empiezan su paso por nuestro Centro y en la mutua convivencia se observan y se manifiestan esos nuevos rasgos adquiridos.

Un hermoso texto sobre un momento de la vida significativo muy bien poetizado.

Gracias a Lourdes Gracia -madre de nuestra alumna Paula Lavado, ejemplo de lo dicho en el texto- por la lectura de esta poesía.